¿Cómo llega a anefp?
Mi primer contacto con anefp fue como representante de Bayer en el Consejo Asesor Comercial, comité del que fui presidente años más tarde en representación de Novartis. Posteriormente, fue presidente de la asociación durante los períodos 2005-2006 y 2009-2011.
¿Cuándo surge la oportunidad de la Dirección General?
Con la jubilación de Rafael García Gutiérrez, los miembros del Consejo Directivo de anefp me ofrecieron la posibilidad de ser el director general de la organización y, tras un período de reflexión, acepté sin dudarlo la propuesta.
¿Qué visión tiene de la entidad?
La entidad cuenta con una dilatada trayectoria, que comenzó hace más de 30 años con el objetivo de poner en marcha un marco legal para las especialidades farmacéuticas publicitarias, hoy conocidas como medicamentos no sujetos a prescripción médica y no reembolsados. Treinta años después, la asociación ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos y a las demandas de la sociedad del siglo XXI. Es por ello que amplió su ámbito de actuación también a medicamentos homeopáticos, cosméticos, complementos alimenticios, plantas medicinalesy productos sanitarios no financiados y sin receta. Y desde este ámbito caminamos hacia una visión común: el desarrollo del sector del autocuidado de la salud.
Pero anefp es también un agente de referencia para todos los sectores implicados en el autocuidado de la salud. No podemos olvidar la importancia que este sector tiene para el sistema sanitario, cuya viabilidad y sostenibilidad pueden recibir una ayuda imprescindible desde nuestro ámbito, y también para los profesionales sanitarios y, muy especialmente, para los farmacéuticos, a quienes nuestros medicamentos y productos no sólo ayudan en el desempeño de su rol de atención farmacéutica y de consejo profesional, sino que también colaboran a la viabilidad de su oficina de farmacia.
¿Qué valores principales que marcan la filosofía de anefp?
Diría que uno de los principales valores de anefp es precisamente que aporta valor, no sólo a sus compañías asociadas, sino también al resto de agentes implicados en el autocuidado de la salud: valor social y económico a nuestro sistema sanitario, valor profesional y económico a la oficina de farmacia y valor formativo en educación sanitaria a los ciudadanos.
¿Cuáles son las expectativas sobre el crecimiento del sector del autocuidado de la salud?
Teniendo en cuenta que el sector del autocuidado de la salud en los países europeos desarrollados alcanza el 15% y en España no superamos el 7%, es evidente que el mercado consumer health en nuestro país está infradesarrollado, lo que nos permite ser optimistas respecto a su futuro. Nuestro objetivo es alcanzar en los próximos años esta cuota europea del 15% respecto al mercado farmacéutico total.
¿Cuáles son los objetivos actuales de la industria del autocuidado de la salud?
En estos momentos anefp tiene planteados tres objetivos a cuya consecución estamos dirigiendo todos nuestros esfuerzos: libertad de precios para los medicamentos desfinanciados el pasado mes de agosto, utilización de un nomenclátor único en el que estén incluidos todos los medicamentos, independientemente de su estatus, con o sin receta, y de su financiación o no, y la sustitución del Control Previo Sanitario por un sistema de autorregulación.
¿El farmacéutico es consciente de su papel de director del autocuidado de la salud?
Creemos que la concienciación es cada vez mayor, pero todavía queda camino por recorrer. En ese camino siempre encontrarán como aliado al sector del autocuidado que, a través de cuyos medicamentos sin receta y no financiados y de los productos de autocuidado, ofrece al farmacéutico una oportunidad para ampliar su rol de consejero de salud y también para hacer viable su oficina de farmacia.
¿Qué necesitan las oficinas de farmacia para afrontar el presente y el futuro del sector?
Por una parte, el sector del autocuidado de la salud necesita del farmacéutico para su desarrollo, ya que su consejo profesional es imprescindible para que el ciudadano pueda autocuidar de forma responsable su salud y quede garantizada la seguridad y eficacia del medicamento sin receta adecuado para el tratamiento de una dolencia leve.
Y por otra parte, la oficina de farmacia necesita también del sector del autocuidado de la salud en una doble vertiente, por un lado para potenciar y reforzar a través de su consejo la atención farmacéutica y, por otro, por la contribución que los medicamentos y productos de autocuidado hacen a la viabilidad económica de las oficinas de farmacia. En este sentido, me gustaría hacer referencia al folleto informativo “anefp, por la supervivencia de la oficina de farmacia”, en el que se incluyen datos muy significativos y relevantes que ponen de manifiesto cómo los productos de autocuidado generan proporcionalmente más margen que los medicamentos financiados. En el caso de que una farmacia tenga el 40% de sus ventas en productos de autocuidado, éstos representarán el 57% de su margen.
¿Cómo se pueden defender las oficias de farmacia ante los impagos?
Sin duda, la situación que actualmente están viviendo la gran mayoría de las oficinas de farmacia es crítica y están viendo comprometida en gran parte su viabilidad económica. En este sentido, el sector del autocuidado de la salud puede ayudar a la oficina de farmacia a paliar en alguna medida esta situación económica a través de una apuesta decidida por los medicamentos y productos para síntomas menores. FV
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