RILASTIL, marca experta en el cuidado dermatológico de la piel, amplia su línea para el cuidado de pieles con tendencia acneica. El acné es una de las patologías dermatológicas más frecuentes y representa el 25 % de las consultas al dermatólogo. Entrevistamos a Anahí Gil, Marketing Manager de Rilastil, para que nos desvele el ritual de cuidados de esas personas bajo tratamiento anti-acné o con pieles grasas con tendencia acneica.
¿Cuál es el posicionamiento de RILASTIL en el mercado español?
Rilastil es la marca dermatológica que quiere protagonizar el futuro de la dermatología. Una dermatología personalizada, conectada, inclusiva y cercana, siempre de la mano de dermatólogos, farmacéuticos y pacientes. Formulamos los productos en búsqueda del equilibrio y la optimización entre eficacia, seguridad y sensorialidad. Teniendo siempre presente nuestro compromiso con la transparencia y seguridad, es por ello que en todo lo que hacemos priorizamos la honestidad científica.
Respecto al acné, sabemos que 1 de cada 2 pacientes no cumple con las rutinas para combatir este acné, por ello deseamos crear nuevas rutinas; más minimalistas para un mejor cumplimiento, con productos efectivos, que unifiquen las distintas necesidades de una piel acneica y con una galénica diferenciadora como es el caso del nuevo Acnestil Micropeeling.
El acné: ¿qué es y cómo combatirlo?
El acné, es la patología de la piel número 1 a nivel mundial, afectando al 80 % de los adolescentes y al 40 % de los adultos. Produciendo molestias en la piel por la inflamación o en muchos casos teniendo un impacto psicológico.
El acné es una dermatosis inflamatoria del folículo pilosebáceo. Esto se debe principalmente a factores como: aumento de la producción de sebo, hiperproliferación de queratinocitos que obstruyen el conducto de este folículo pilosebáceo, colonización bacteriana o inflamación en la piel. Además, en algunas ocasiones, el acné puede ser desencadenado por cambios hormonales, provocados por situaciones como el embarazo, la menstruación o la pubertad.
Sin embargo, no podemos dejar de lado que el acné también tiene un componente genético fundamental y en muchos casos no puede evitarse, pero siempre podrá controlarse con una rutina adecuada de higiene facial y productos adecuados.
Para tratar esta patología y según el grado de acné que se tenga, lo mejor es acudir a un dermatólogo quien será el que aconseje el tratamiento adecuado para combatirlo.
¿Qué cuidados diarios imprescindibles aconsejáis?
Es imprescindible que una rutina básica para una piel con tendencia acnéica sea compuesta por productos específicos para pieles con esta característica.
Es esencial empezar por una limpieza adecuada - como puede ser Acnestil gel o mousse - posteriormente aplicar una loción exfoliante con acción sebo-reguladora, y una fotoprotección específica en el caso de exponernos al sol, que este formulada para pieles acneicas y que además de tratar, hidrate la piel. Por la noche, la piel necesita confort y más hidratación.
En el caso de estar bajo tratamiento farmacológico o tópico anti-acné, es esencial tener una rutina compuesta por productos que no solo sean aptos para pieles con acné, sino que sean idóneos para pieles sensibilizadas; sin alcohol, con ingredientes hidratantes y algún componente como la Niacinamida para calmar la piel.
¿RILASTIL acaba de lanzar ACNESTIL MICROPEELING, qué hace diferente este producto?
Cuenta con acción sebo-reguladora y, además, reduce puntos negros, así como imperfecciones producidas por el acné inflamatorio.
Ayuda a eliminar las células muertas de la piel, aportando luminosidad y uniformidad. Si se utiliza sobre pieles grasas, actuará sobre el exceso de sebo, eliminando las impurezas y destapando los poros.
Al tratarse de un peeling químico y no físico, y no contener componentes irritantes, ACNESTIL MICROPEELING ha sido formulado para ser tolerado por las pieles más sensibilizadas.
Esto convierte a Acnestil Micropeeling en el complemento perfecto para cualquier tratamiento de acné. Ya sea tratamiento independiente, en combinación con el uso de retinoides (como las isotretinoinas) o post-tratamiento farmacológico.