Cerca de una quincena de farmacias comunitarias de Almería han iniciado esta semana su participación en el proyecto piloto ‘#COFALMEM: Proyecto para la detección de deterioro cognitivo en Farmacias de Almería’, liderado por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Almería y coordinado por la doctora en Educación Sanitaria, farmacéutica formadora del COF Almería y Health Coach, Mar Crisol.
El proyecto tiene como objetivos principales detectar signos de deterioro cognitivo en pacientes a través de la realización de test probados científicamente, en farmacias comunitarias de Almería. “Con ello, se quiere derivar adecuadamente a aquellos pacientes que presenten signos de deterioro cognitivo al médico correspondiente para una evaluación más exhaustiva y, del mismo modo, evaluar la eficacia de una intervención farmacéutica mediante la administración de vitamina B12 en pacientes con deterioro cognitivo leve y medir el impacto de la intervención farmacéutica en el estado cognitivo de los pacientes mientras se realiza el seguimiento”, apunta Mar Crisol.
La intervención tendrá una duración de cinco semanas, durante los cuales se llevarán a cabo las pruebas de detección inicial, se realizará la intervención farmacéutica en los casos correspondientes y se llevará a cabo el seguimiento de los pacientes.
Los sujetos de estudio participantes serán mayores o igual de 50 años que acudan a las farmacias comunitarias inscritas en el proyecto. Se solicitará el consentimiento informado de los participantes antes de realizar las pruebas de detección. Se realizarán dos test y las puntuaciones obtenidas en ambas pruebas se comunicarán al final del estudio al departamento de formación del Colegio. Aquellos participantes que obtengan puntuaciones indicativas de deterioro cognitivo serán derivados al médico correspondiente para una evaluación más detallada.
A los pacientes con deterioro cognitivo leve se les ofrecerá una indicación farmacéutica de vitamina B12 y se proporcionará información detallada sobre la dosis y la duración del tratamiento. Los pacientes que hayan recibido la intervención farmacéutica volverán a realizar los dos test a las cinco semanas de iniciado el tratamiento, registrándose las puntuaciones obtenidas en ambas pruebas para evaluar el impacto de la intervención.
Hay que recordar que la detección temprana del deterioro cognitivo es crucial para poder intervenir de manera oportuna y brindar un tratamiento adecuado. Identificar los primeros signos de problemas cognitivos puede ayudar a retrasar su progresión, mejorar la calidad de vida del individuo y permitirle mantener su independencia por más tiempo. Además, al detectar el deterioro cognitivo en etapas iniciales, se pueden implementar estrategias de manejo y apoyo que contribuyan a minimizar sus efectos negativos en la vida diaria. Por lo tanto, es fundamental estar atentos a cualquier señal de deterioro cognitivo y buscar ayuda profesional cuanto antes.