El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM) y Fundación ONCE reforzarán su colaboración para acercar la red de tres mil farmacias abiertas en la Comunidad de Madrid, sus servicios y los profesionales del sector a las personas con discapacidad y las personas mayores.
Con este objetivo se establecerán programas de formación y de cooperación entre ambas entidades que permitan avanzar en la accesibilidad física, digital, cognitiva o sensorial de todas las personas en el ámbito farmacéutico.
El director general de Fundación ONCE, José Luis Martínez Donoso, y el presidente del COFM, Manuel Martínez del Peral, firmaron hoy el convenio que prevé también la difusión, entre los colegiados de la corporación madrileña, de la labor llevada a cabo por Fundación ONCE.
El Colegio promoverá, además, la participación de las personas inscritas en la Bolsa de Voluntarios del COFM, que así lo soliciten, en los proyectos y actividades de la Fundación.
La corporación madrileña valorará el recurso ofrecido por los Centros Especiales de Empleo creados en el seno de ILUNION (grupo empresarial socialmente responsable del Grupo Social ONCE) en su política de Compras Socialmente Responsables como medio de fomentar la empleabilidad de las personas con discapacidad.
En su intervención, José Luis Martínez Donoso puso de manifiesto que “la colaboración con entidades como el Colegio de Farmacéuticos de Madrid nos permite tener una mayor capilaridad en nuestras actividades y multiplicar el impacto. Sólo a través de este tipo de convenios podemos llevar a cabo iniciativas que permiten tener un impacto de cambio y mejora en la sociedad”.
Para Manuel Martínez del Peral, “esta alianza con Fundación ONCE nos abre la oportunidad de seguir mejorando la calidad de vida de muchas personas con discapacidad, a través de un servicio asistencial más adaptado a sus necesidades, que nos permita potenciar el acceso a la información sobre los medicamentos, la educación para la salud o los servicios farmacéuticos disponibles”. De este modo, Martínez del Peral considera que “se puede contribuir así al cumplimiento y adherencia a los tratamientos, dentro de nuestro compromiso social y sanitario con los pacientes y los colectivos más vulnerables de nuestra sociedad”.