La Junta de la Federación de Asociaciones de Farmacias de Cataluña (FEFAC), con su presidente, Antoni Torres, se ha reunido hoy con el presidente de la Asociación de Farmacia Rural de Cataluña (AFRUC), Paco Mateo, y con otros miembros de esta, como Isabel Garrido, farmacéutica de Villalba y les Arcs; y las farmacéuticas también miembros de la FEFAC, Carmen Hernández, farmacéutica de Benissanet, y Amèlia Barbero, farmacéutica de Flix. El encuentro ha tenido lugar en Vinebre, donde el presidente de la AFRUC ejerce de farmacéutico comunitario.
El objetivo del encuentro, como ha explicado el presidente de la Asociación de Farmacias de Tarragona, Eduardo Cacho, era "establecer un nexo para ayudarnos mutuamente, ya que todos defendemos el mismo modelo de farmacia".
En este sentido, el presidente de la AFRUC ha hecho un llamamiento a todos los farmacéuticos para que "la farmacia rural ofrece un servicio sanitario, que es para lo que hemos estudiado" esta carrera. De esta manera, Mateo ha recordado qué significa ser farmacéutico y cómo esta profesión ofrece un valor añadido a cada municipio.
En diferentes momentos de la conversación, se ha repetido la idea de que la realidad de cada farmacia es única pero que esto es aún más motivo para ir todos a una y trabajar juntos. Precisamente, la despoblación que se sufre en algunos municipios provoca que su viabilidad esté totalmente comprometida e, incluso, algunas llegan a desaparecer al no encontrar tampoco relevo generacional. Esto pone en peligro el concepto de "ciudad en 15 minutos" que defiende el presidente de la FEFAC, donde la oficina de farmacia se convierte en un elemento clave como "cohesionador social". En palabras de Torres, "un territorio se despuebla cuando no tiene servicios", y esto a nivel de sociedad perjudica a todos ya que "la gente mayor es la que se queda en los pueblos y el coste público y personal de mantener la equidad en el acceso a los servicios es muy alto".
Como resultado de la reunión, se ha decidido crear una comisión de trabajo con miembros de la AFRUC y de la FEFAC para, paso a paso, encontrar soluciones reales a los problemas de estas farmacias. Igualmente, para tener más fuerza conjuntamente para poder materializarlas. La idea que desde la FEFAC también se ha querido transmitir es que los problemas que afectan a estas farmacias afectan a todas la demás.