Más de 500.000 niños en España sufren enuresis, “el 16% de los niños de 5 años, el 10% de los de 6 años y el 7,5% de los de 10 años de edad” se hacen pis en la cama regularmente.
Cataluña (90.772), Aragón (14.247) y Baleares (13.299), suman más de 118.000 niños con escapes nocturnos.
Hacerse pis en la cama tiene importantes repercusiones en el niño, “la enuresis no es sólo un problema de sábanas mojadas, puede ser un síntoma de una enfermedad urológica y si se descarta la enuresis, aunque pueda haber resoluciones espontáneas, su tratamiento oportuno resuelve los escapes además de disminuir el impacto psicosocial en el niño”, indicó la Dra. Anna Bujons, Jefa de la Unidad de Urología Pediátrica de la Fundació Puigvert de Barcelona, en la reunión que se acaba de celebrar de manera virtual para concienciar sobre este problema.
De hecho, “si no se trata, la enuresis nocturna, no siempre se resuelve por sí misma”, pudiendo llegar a la adolescencia o la edad adulta con implicaciones aún más graves.
Según indica la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP), “la enuresis nocturna se puede considerar un problema importante de salud, posiblemente, infra diagnosticado y, por lo tanto, infra tratado. Su diagnóstico precoz y tratamiento pueden ayudar a estos niños a mejorar su calidad de vida. Es un motivo frecuente de consulta en pediatría, aunque insuficientemente atendido desde el punto de vista científico”.
A la insuficiente atención se suma la actual situación sanitaria derivada de la pandemia y el confinamiento, que ha provocado que muchos niños no hayan podido visitar regularmente a su pediatra. Los expertos alertan sobre aquellos casos que han quedado sin diagnosticar, porque son niños que sufren su problema sin una solución.
Los médicos definen la enuresis “como la eliminación nocturna, involuntaria y funcionalmente normal de orina que ocurre a una edad en la que cabe esperarse en el niño un control voluntario de la micción”, es decir, mojar la cama durante el sueño, sin despertar, pasados los 5 años.
Llamar la atención sobre la dolencia es primordial para los expertos pues “hay que añadir la dificultad en la detección de estos niños porque sus padres, probablemente enuréticos en su infancia, no conocen la existencia de tratamiento médico ni lo asocian a un problema pediátrico”; algo incomprensible cuando el primer estudio mundial de asociación del genoma (GWAS en sus siglas inglesas) en la enuresis, indica que la enuresis es probablemente hereditaria. “El riesgo de orinarse en la cama es entre 5 y 7 veces mayor entre los niños con un padre enurético y aproximadamente 11 veces más si ambos padres mojaron la cama”.
La valoración física por el pediatra o urólogo, la detección de posibles enfermedades asociadas, la realización de un diario miccional, el tratamiento farmacológico o el tratamiento funcional son las pautas para el correcto diagnóstico y tratamiento de la enfermedad según la SEPEAP.
“En la mayoría de los casos, la enuresis nocturna es causada por una sobreproducción de orina por la noche o una capacidad reducida de la vejiga. La incapacidad de despertar puede ser otra causa”. En este contexto es importante saber que la enuresis está asociada a otras enfermedades “con frecuencia, existe comorbilidad, habiéndose comprobado una estrecha relación con otras patologías, como estreñimiento, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS)”, por lo que es importante prestarle la debida atención y descartar patologías más graves.
Por eso, si un niño moja la cama de manera regular, pasados los 5 años es importante consultar al pediatra.