El certificado V-Label es un símbolo reconocido internacionalmente para el etiquetado de productos y servicios veganos y vegetarianos que supone una referencia sencilla para ayudar a los consumidores a elegir productos veganos y vegetarianos de calidad y fiables.
Según Modest Prenafeta, Fundador y Director de Vega Cosmética, “muchos productos se denominan veganos pero, Vega Cosmética lo demuestra, ya que posee el certificado que nos autoriza a utilizar el anagrama de la organización V-Label de la UVE y porque nuestros ingredientes y formulaciones han sido cuidadosamente inspeccionados antes de concedernos esta distinción”.
Por su parte, bajo el certificado Halal, otorgado por el Instituto Islámico Español, Vega Cosmética se compromete a utilizar sólo materias primas de origen Halal y, a que no exista contaminación cruzada con otros productos para que se mantenga la trazabilidad del proceso.
Actualmente, la gama de productos de Vega Cosmética se compone de gel de baño, crema hidratante y champú, todos ellos elaborados con ingredientes naturales de origen vegetal y por supuesto, respetando el principio cruelty-free, al no contener ningún ingrediente testado en animales. Sus formulaciones están estudiadas para garantizar el cuidado de la piel de una forma natural, no irritante ni invasiva para el medio ambiente.
Para su elaboración, Vega Cosmética utiliza ingredientes de origen natural, todos ellos derivados del aceite de coco, así como incorpora los ingredientes de origen sintético imprescindibles para su efectividad y, en los que durante su producción no se han efectuado procesos enzimáticos o de fermentación.
En primer lugar, el aceite de coco es desdoblado en ácidos grasos y glicerina. Posteriormente se efectúa una destilación fraccionada para separar los distintos componentes según su peso molecular. A continuación, se llevan a cabo procesos de hidrogenación, conversión en alcoholes grasos, sulfatación, etc para dar lugar a los ingredientes finales.
En cuanto a la producción del gel de baño o del champú, se efectúa en reactores de una capacidad entre 1.000 y 10.000 L con agitación constante. Primero se añade el agua desionizada y seguidamente los ingredientes principales, poco a poco, para evitar espumación. Una vez homogeneizado se añade el perfume y finalmente el cloruro sódico y el ácido cítrico, para ajustar la viscosidad y el Ph (5,5-6). Una vez corregido todo, el producto va directamente a la planta de envasado.
Por su parte, la fabricación de la crema se efectúa en reactores calorifugados, ya que algunos componentes son sólidos a temperatura ambiente y su sistema de agitación es sofisticado debido a la alta viscosidad de la mezcla.
Cabe destacar la fragancia a lavanda de los productos Vega Cosmética. Su elección no es casual, pues se buscaba un perfume natural, fresco, no demasiado fuerte o agobiante, pero potente. Se realizó un briefing con 10 fragancias basadas en Lavanda , hasta que se eligió la actual, con una base floral atractiva y suficientemente persistente.
Desde su recolección hasta el final, todo se efectúa dentro de las más estrictas reglas del cuidado personal y del medio ambiente y por supuesto, ningún ingrediente empleado en su elaboración ha sido ensayado en animales. Además, Vega Cosmética no emplea parabenos ni colorantes en sus cosméticos.
La producción de Vega Cosmética se lleva a cabo en una fábrica contratada y situada en Sant Celoni (Barcelona), que cumple con todas las reglamentaciones requeridas para la fabricación de productos cosméticos en cuanto a registro de sanidad, higiene y procesos estancos, donde no haya lugar a fugas ni posibles mezclas de otros ingredientes. La capacidad de producción de Vega Cosmética en la misma, es de 6 millones de unidades/año.