Se recomienda a las farmacias gestionar el escaparate como un elemento importante dentro del plan de marketing de la farmacia y no como un activo inmobiliario. Además, apoyarse en laboratorios con marcas importantes para la farmacia. El laboratorio debe invertir únicamente si el escaparate es eficaz y ayudar a la farmacia a diseñar escaparates que funcionen. Medir si funcionan y el por qué es vital para lograr los resultados esperados y rentabilizar la inversión.