Se trata de una iniciativa que ha editado la primera ‘Guía Práctica de Entornos Accesibles para las Personas Mayores’, una investigación técnica centrada más allá de los entornos físicos que se trabajan habitualmente en el ámbito de la accesibilidad. De esta manera, se han detectado 130 problemáticas concretas en hogares de personas mayores y se han propuesto un total de 104 soluciones para paliarlas, algunas de fácil aplicación. Otra de las importantes novedades del proyecto TAP (Técnico para la Autonomía y Prevención) ha sido la creación de una red de sinergias entre profesionales del sector privado y de la Administración pública, beneficiarios y cuidadores no profesionales, para generar más seguridad y conexión entre ellos con el fin de contribuir a la felicidad de las personas mayores que tratan cada día.