Según datos de esta misma organización, para el año 2025 se estima que habrá 1.200 millones de personas de más de 60 años en todo el mundo y dos de cada tres vivirán en países en desarrollo. Es por ello que los hábitos de vida van a jugar un papel “protector” o ralentizarán el desarrollo de patologías crónicas. Ejercicio tanto físico como mental y dieta saludable son algunas de las principales actividades promotoras de un envejecimiento saludable.