Millones de personas en el mundo reciben una transfusión de sangre que salva sus vidas, pero detrás de esto hay una preocupación a la que las Autoridades Sanitarias a nivel mundial tienen que prestar especial atención: las transfuciones de sangre que salvan vidas no son suficientes. Por este motivo hace unos años nace el Patient Blood Management (PBM).
PBM es un concepto multidisciplinario que se centra principalmente en la seguridad del paciente evitando y / o tratando la anemia, minimizando la pérdida de sangre y el sangrado y optimizando la reserva fisiológica de la anemia. Los estudios han demostrado que esta estrategia integral minimiza significativamente el uso de productos sanguíneos alogénicos y por lo tanto reduce sus efectos adversos en el resultado del paciente. También se ha demostrado que el PBM ahorra costos para los sistemas de salud.
Todo este movimiento en torno a la sangre nace con un mandato de la OMS en el año 2010, que insta a la Comunidad Científica Internacional a prestar atención al tema de la sangre, pidiendo que se haga un uso óptimo de la misma, ya que es un bien escaso, que no se puede fabricar, y que depende de un proceso de donación.
“Las donaciones no son suficientes, la población envejece, cada vez hay más necesidades y hay menos consecución de sangre”, comenta el Dr. Manuel Quintana, Secretario saliente de la Sociedad Española de Medicina Intensiva Crítica y Unidades Coronarias. Es por esto, que conseguir una optimización de los recursos sanguíneos es una necesidad indispensable para el bienestar del paciente.
Por este motivo, el Grupo de Transfusiones de la SEMICYUC aborda durante el LII Congreso Nacional este tema donde se repasa las necesidades reales sanguíneas de los pacientes, y las posibles alternativas a la sangre. Esto es, los modelos de coagulopatía y alternativas terapéuticas, ya que “si mejoramos los métodos diagnósticos podemos detectar que el paciente necesita solo un elemento de la sangre, y optimizar las transfusiones de sangre”, apunta Manuel Quintana.
Destaca durante el LII Congreso:
- Pruebas diagnósticas para optimizar la gestión del sangrado.
- Fundamentos fisiopatologicos para entenderlo y usar los recursos que se necesitan sin malgastar otros.
De este modo, la SEMICYUC dedica un espacio al manejo del paciente crítico con anticoagulantes, un tema que va increscendo y que requiere una atención especial por parte de los médicos intensivistas. “Deberíamos ser más exquisitos en las donaciones, para ello, una de las soluciones razonables es emplear mejor la sangre”, concluye el Secretario de la SEMICYUC.