Uxue Barkos aseguró que “las barreras personales y sociales que nos impiden hablar de esta realidad agravan los síntomas y consecuencias de los trastornos mentales” y añadió que el abordaje de la depresión es un reto informativo que requiere una especial sensibilidad. “Los medios son aliados, ‘Un Congreso para salir de la depresión’ es una oportunidad para debatir y construir un mejor tejido social”.
La presidenta del Gobierno Navarra recordó algunos datos de la “Encuesta Europea de Salud en España 2014” que ponen de manifiesto que la sintomatología depresiva supera el 20% de incidencia entre los grupos sociales más desfavorecidos, frente al 12% entre otros grupos de población y que, estas diferencias, se incrementan aún más con la edad. Según Uxue Barkos, dichos datos muestran que “conforme se desciende en la escala social, crece progresivamente el porcentaje de personas con sintomatología depresiva”.
La presidenta hizo un llamamiento a la colaboración intersectorial de las distintas administraciones públicas y de la sociedad civil para influir en los determinantes socioeconómicos y culturales que condicionan de forma muy relevante el riesgo de enfermar. Ante los más de 170 profesionales que participarán durante el fin de semana en este XIII Congreso, Uxue Barkos reconoció que “mejorar la salud mental de la población es una tarea de gobierno y que es la Administración a quien compete desarrollar las estrategias comunitarias oportunas, los programas preventivos y garantizar los recursos técnicos, pero “todo esto no es factible sin la necesaria participación del tejido social”.
El director general de la Clínica Universidad de Navarra, José Andrés Gómez Cantero, anfitrión del encuentro, señaló que en la actualidad la información sanitaria atraviesa muchos desafíos e insistió en la necesidad de enarbolar la bandera de la calidad de las informaciones, apostar por la especialización en salud y, en suma, fortalecer el buen periodismo.