La Vitamina C se necesita para el crecimiento y reparación de tejidos en todas las partes del cuerpo. Es importante consumir vitamina C ya que tiene cinco beneficios importantes. En primer lugar, previene la pérdida del tejido óseo y el envejecimiento. En segundo lugar, mejora la salud de la piel y forma tejido cicatricial.
Por otro lado, repara y mantiene el cartílago, los huesos y los dientes, además de fortalecer las defensas y reducir la duración de los resfriados. Por último, la vitamina C ayuda a la absorción del hierro y regenera la Vitamina E. Las fuentes de Vitamina C son los alimentos como frutas y verduras, los complementos alimenticios y también se puede encontrar en algunos productos cosméticos.
¿Cómo aportar más vitamina C?
1. Prepara tus zumos justo antes de consumirlos porque la vitamina C se oxida fácilmente.
2. Cocina las patatas con su piel, así aprovechas el contenido de la vitamina C que estas poseen.
3. Incorpora un zumo de limón a las ensaladas.
4. Añade pimiento crudo a tus comidas, es muy rico en vitamina C.
5. Busca ascorbyl palmitate o ascorbyl stearate entre los ingredientes de tus cremas y sérums faciales.