En el corazón del barrio del Eixample se encuentra la Farmacia Aribau de Barcelona, caracterizada siempre por un mix de facturación invertido, en favor de la venta libre. María y Victor son un matrimonio de farmacéuticos que regentan la Farmacia Aribau y transmitieron su objetivo principal: crecer en venta libre y optimizar el espacio destinado al público ofreciéndole a los clientes una experiencia de compra agradable.
La farmacia es diferente y está preparada para un tipo de cliente muy exigente, consumidor de productos exclusivos y deportistas. De hecho, cuenta con un abundante público masculino con una marcada cultura sobre el cuidado personal. La decoración de la Farmacia Aribau se ha modificado para darle un aire nuevo. Se ha rescatado el ladrillo visto y se ha retro-iluminado para darle mayor textura y calidez. Se han utilizado materias primas como la madera, el hierro y el ladrillo visto.
Cobra especial importancia la sección dermocosmética natural, en la que se incluye un espacio destinado al maquillaje y un córner de ortopedia deportiva que incluye un probador. Los objetivos de este proyecto eran impactar al viandante, romper estereotipos y convertirse en una farmacia diferente, atrevida y atractiva.