Este código va, por tanto, más allá de los códigos deontológicos (que se centran en los mínimos obligatorios exigibles por ley y sancionables) y pretende promover una serie de ideales y actitudes responsables conforme a una serie de valores que refuercen el compromiso del farmacéutico comunitario con su ejercicio profesional y con la sociedad en general.
El código se articula en cuatro grandes apartados que abarcan la responsabilidad del farmacéutico con los pacientes y usuarios, con la sociedad, con la profesión y, por último, la responsabilidad de SEFAC como organización que debe regirse por normas éticas. Además, el documento incluye como anexo una actualización del código ético para la dispensación de medicamentos de uso humano no sujetos a prescripción médica a través de sitios web de las farmacias comunitarias, que SEFAC presentó en junio de 2014 y que ahora incluye algunas sugerencias del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) en materia de accesibilidad de la web para personas con discapacidad.