Atenzia, empresa especializada en atención a las personas en el domicilio, ha observado un incremento en el número de madres mayores de 65 años que viven solas, en concreto un 4,7% más respecto al pasado año. De hecho, prácticamente la mitad de los mayores de 65 años residen en hogares unipersonales, y las cifras aumentan a medida que se eleva el ratio de edad.
Estas personas mayores que viven o pasan gran parte del día solas en sus domicilios suelen ser personas con discapacidad, personas con problemas de movilidad y enfermos crónicos; así como a personas, que aun siendo jóvenes e independientes, buscan seguridad. El apoyo y la cercanía es un aspecto muy importante y lo es aún más en fechas señaladas en las que algunas madres no tienen tan cerca a sus hijos. El apoyo tanto asistencial como emocional cada vez a más madres que residen solas hace que se sientan seguras y acompañadas.