La orden ya está siendo consensuada con el colectivo de farmacéuticos de Castilla y León, y la medida podría beneficiar a un 15% de las oficinas de farmacia de la región. Ante el peligro de que algunas oficinas del medio rural no puedan soportar dicho recorte en sus beneficios y se vean obligadas a cerrar, la Administración regional proyecta aplicar un índice corrector del margen comercial que tendría efectos retroactivos desde el segundo semestre de 2012.
En la actualidad, de las 1.639 farmacias abiertas en Castilla y León, 629 están situadas en zonas urbanas, 146 en áreas suburbanas y 864 establecidas en zonas rurales. FV
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