En España hay más de 800.000 personas anticoaguladas. Se trata de pacientes que son más vulnerables ante una emergencia médica o una intervención quirúrgica. En este sentido, la terapia anticoagulante previene a estas personas de sufrir una trombosis o una embolia.
Cada vez es más importante que los pacientes anticoagulados se identifiquen como tales ante un profesional sanitario. La anticoagulación puede explicar alteraciones analíticas y en la exploración pero, sobre todo, es importante que estos pacientes estén identificados porque los anticoagulantes pueden producir hemorragias, que tienen un origen, diagnóstico y tratamiento diferentes a las hemorragias de otra causa, incluso cuando se producen en el mismo órgano.
Luciano Arochena, presidente de FEASAN, explica que “otro de los objetivos que perseguimos con esta iniciativa es concienciar a los propios pacientes de la importancia de comunicar su condición de paciente anticoagulado ante el profesional sanitario, responsabilizándose de su propia salud y reduciendo los riesgos”. FV
{jcomments on}