Esta patología representa un problema de salud importante en los diabéticos. Su prevalencia es de entre un 15-25% en los diabéticos, según series y su incidencia anual oscila entre el 1% y el 4,1%. “Más de un 15% de los diabéticos que lo padecen necesitarán una amputación mayor a lo largo de su evolución. Además, esta patología provoca dolor neuropático en un alto porcentaje, lo que precisa de tratamientos específicos para mitigar este dolor”, explica el Dr. Albert Pérez, responsable del equipo de Pie y Tobillo del Hospital Universitario de Bellvitge y organizador de la jornada.
El pie diabético se define por la aparición de lesiones tisulares o ulceraciones resultado de la interacción de la neuropatía, la isquemia y la infección debido a pequeños traumatismos que pueden llegar a amputaciones. La curación de las heridas en los pies de los pacientes diabéticos se altera por hiperglucemia, isquemia, malnutrición, neuropatía, infección y una supresión de la respuesta inmune por lo que es importante la exploración periódica de los pies.
Las lesiones se pueden prevenir a través del excelente control de la diabetes, la evaluación periódica del pie por el propio paciente, el especialista y/o el podólogo, el uso de medidas correctoras en caso de neuropatía o artropatía y la utilización de vasoactivos, si el paciente presenta arteriopatía. FV
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