Los participantes destacaron la importancia de la educación sanitaria de los pacientes a la hora de fomentar políticas de autocuidado de la salud. En concreto, el presidente del Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social, Manuel de la Peña, reclamó la promoción de la educación sanitaria en los centros escolares. “Es mejor no enfermar que tener que curar, por lo que hay que fomentar prácticas de autocuidado y de hábitos de vida saludable desde la infancia”, afirmó De la Peña.
Por su parte, el presidente de la Fundación anefp y director de la Asociación para el Autocuidado de la Salud, Rafael García Gutiérrez, calificó de valientes las medidas adoptadas por el Ministerio de Sanidad. Asimismo, aseguró que lo que se está haciendo “no es desfinanciar medicamentos, sino priorizar recursos ante un escenario de crisis económica como el actual”.
No obstante, García Gutiérrez puntualizó que la desfinanciación de fármacos en sí misma sólo es eficaz si se lleva a cabo un seguimiento que permita comprobar que las prescripciones no se derivan hacia medicamentos más caros que permanecen dentro de la prestación farmacéutica pública.
La subdirectora adjunta de Calidad de Medicamentos y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, María Jesús Guilló, explicó en el transcurso de la jornada que la propuesta de desfinanciación de medicamentos adoptada en la última reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad no es definitiva, ya que se ha abierto el trámite de audiencia a las partes afectadas y podrían producirse modificaciones. En su opinión, la lista definitiva de medicamentos excluidos de la financiación pública podría conocerse en el mes de septiembre.
A este respecto, Guilló aclaró que es difícil conocer el impacto económico real de esta medida, dado que están en marchas procesos de modificación de la aportación de los ciudadanos al copago farmacéutico y de reducción de precios de los medicamentos. Además, la representante del Ministerio de Sanidad anunció la creación de un “nomenclátor maestro” que registrará todos los medicamentos comercializados en España, incluyendo aquellos no financiados y los no sujetos a prescripción médica.