Los datos indicados proceden del “Estudio sobre el conocimiento de las implicaciones de la prescripción por principio activo”, realizado por Ipsos y la compañía químico farmacéutica alemana Merck KGaA entre más de dos mil españoles mayores de edad, en las distintas comunidades autónomas.
La encuesta se ha llevado a cabo a raíz de la confusión generada en la sociedad española tras la implantación del Real Decreto-Ley 9/2011 (en vigor desde el 1 de noviembre pasado) que, entre otros aspectos, obliga a los médicos en determinados supuestos a recetar por principio activo, en lugar de por la marca comercial del medicamento.
Estas son algunas de las principales conclusiones del estudio:
• 7 de cada 10 españoles entre 18 y 65 años confunden la prescripción por principio activo (PPA) con la receta de un medicamento genérico (EFG). Esta confusión se dispara hasta el 94% entre las personas jubiladas y pensionistas, el colectivo que más recursos sanitarios utiliza.
• El 60% de los encuestados cree que la nueva normativa obliga a recetar medicamentos genéricos (EFG), cuando en realidad obliga a prescribir por el nombre del principio activo o molécula que incluyen en su composición tanto los medicamentos de marca como los genéricos y que con esa receta el paciente puede recibir en la farmacia tanto un genérico como un medicamento de marca, siempre que esté a precio menor.
• El 86% de los españoles cree, erróneamente, que los medicamentos genéricos (EFG) son más baratos que los de marca.
• El 70% de los jubilados manifiestan que, a igualdad de precio entre marca y genérico, prefiere seguir tomando su medicamento de marca.
• En general, los españoles prefieren que sea el médico quién decida si deben tomar un genérico o una marca, especialmente entre los jubilados (89%).
• Según la nueva normativa, con una receta por principio activo (PPA), los pacientes tienen derecho a elegir, con el asesoramiento de su farmacéutico, entre un genérico (EFG) o un medicamento de marca, siempre que esté a precio menor. El estudio refleja que más de la mitad de los encuestados no lo saben o tienen un concepto erróneo de este hecho.