El papel del farmacéutico hospitalario está cobrando cada vez más importancia tanto en el diseño de los procesos asistenciales como en el control de resultados, lo que se ve reflejado en su integración de manera cada vez más generalizada en equipos interdisciplinares.
Esta ha sido una de las principales conclusiones que se han puesto sobre la mesa durante el Simposio “El papel del farmacéutico hospitalario en la transformación de la asistencia sanitaria que queremos en 2025” organizado por la compañía biofarmacéutica AbbVie dentro del programa científico del 67 Congreso Nacional de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH).
Este encuentro, forma parte del proyecto AMPHOS, una iniciativa puesta en marcha en 2012 por AbbVie y la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) con la colaboración de World Health Management. El proyecto AMPHOS une a directivos, profesionales sanitarios y pacientes para plantear propuestas de mejora de los procesos hospitalarios y de salud, buscando la optimización de recursos para contribuir a la eficiencia del sistema y mejorar así la calidad asistencial prestada al paciente.
Medir para mejorar
Durante el simposio, se ha puesto en valor el uso, por el farmacéutico hospitalario como parte de un equipo de abordaje multidisciplinar, de medidores de resultados y experiencias reportados por los pacientes (PreMs y PROMs por sus siglas en inglés). Se trata de una herramienta que contribuye a mejorar la calidad asistencial y eficiencia del sistema en un contexto en el que es indispensable abordar cambios en los modelos asistenciales debido a la cronificación de patologías como consecuencia del envejecimiento de la población o avances terapéuticos, entre otros factores.
“Si no medimos los resultados que obtenemos en los pacientes no vamos a poder mejorarlos. Lo importante, en este caso, es resaltar la incorporación, en los últimos años, de la medición de los resultados reportados por los pacientes. Este nuevo enfoque añade valor a la interpretación de los resultados clínicos que ya teníamos en cuenta, y le confiere al paciente un papel muy activo en su proceso farmacoterapéutico”, ha destacado Begoña Tortajada Goitia, delegada de la SEFH en Andalucía y jefa de Servicio de Farmacia Hospitalaria, Hospital Costa del Sol (Málaga). Esta visión es también compartida y valorada por los pacientes. Así, según ha señalado Santiago Alfonso, director gerente de la asociación de pacientes Acción Psoriasis, “medir resultados permite mejorar la atención y aplicar cambios en aquellas acciones con bajos resultados”.
La puesta en marcha de este tipo de sistemas de evaluación es clave en un contexto actual en el que se produce un incremento de la prevalencia de las enfermedades crónicas debido a factores tales como un aumento de la esperanza de vida, envejecimiento de la población y avances terapéuticos en enfermedades anteriormente difícilmente tratables. “El consumo de recursos de la cronicidad hace que sea indispensable abordar cambios en los modelos asistenciales, promoviendo una continuidad asistencial en la que Farmacia Hospitalaria y Farmacéuticos Comunitarios deben trabajar de forma conjunta diseñando estrategias de optimización farmacoterapéutica en el paciente crónico para garantizar los mejores resultados”, ha añadido Tortajada.
Sostenibilidad del sistema en riesgo
El desarrollo de proyectos destinados a buscar soluciones innovadoras para las necesidades descubiertas del sistema de gestión sanitario y que integren a todas las partes implicadas: directivos, profesionales sanitarios y pacientes es cada vez más necesario, según han coincidido todos los participantes en esta jornada.
En este sentido, Ramón Cunillera Grañó, Gerente del Consorcio Sanitario del Maresme y Presidente de la Sociedad Catalana de Gestión Sanitaria y presidente de la Agrupación Territorial de SEDISA en Cataluña, ha señalado que “nuestro sistema sanitario actual tiene riesgos muy importantes de sostenibilidad financiera, de desafección de los profesionales a sus organizaciones o de dificultades de acceso para los ciudadanos, por nombrar tres de los más evidentes. Para ello se requieren transformaciones importantes, y proyectos que contribuyan a visualizarlas”.
Éste es uno de los motivos por los que nace y se redefine cada año el Proyecto AMPHOS (Análisis y Mejora de los Procesos Hospitalarios y de Salud), que tiene por objetivo contribuir a 3 ES-ABBV-221125 la eficiencia del sistema y mejorar la calidad del servicio asistencial. Esta labor se lleva a cabo a través de un grupo de trabajo en el que se integran los diferentes representantes de todos los niveles de gestión del sistema nacional de salud (directivos y profesionales sanitarios) y pacientes. Se trata, por tanto, de un entorno de reflexión compartida en el que se realiza de manera continua un análisis y, como consecuencia, la elaboración de propuestas de mejora de los procesos hospitalarios y de salud.
Tal y como explica Antonio Bañares, director de Relaciones Institucionales de AbbVie, “este simposio ha supuesto un entorno de reflexión compartida sobre la farmacia hospitalaria con un enfoque multidisciplinar, que continúa la línea de nuestro proyecto AMPHOS, con el que buscamos hacer un análisis del flujo asistencial para impulsar una organización transversal y reorientar la asistencia para ofrecer la mejor calidad y experiencia a los pacientes”.