Hoy en día nadie cuestiona el uso del ordenador como herramienta de trabajo diario, la calefacción o la existencia de Internet… ¿por qué no se entiende entonces el uso de otras tecnologías igualmente necesarias para el buen funcionamiento de las farmacias? ¿Cómo es posible que existan herramientas de carácter tecnológico plenamente implantadas de forma global en el sector farmacéutico en otros países y que en España todavía estén en fase de implantación? ¿Conocen realmente los farmacéuticos españoles las nuevas tecnologías con las que pueden contar?
A los cuatro pilares en los que se ha sustentado el mundo de la farmacia a lo largo de los siglos –medicina, conocimiento, ciencia y comercioen las últimas décadas se ha unido un quinto, el de la tecnología, que gana adeptos y que en las últimas décadas ha sabido convertirse en epicentro del día a día de los farmacéuticos. Y es que la tecnología ha llegado para quedarse en las farmacias del siglo XXI, y los farmacéuticos lo saben. Son conscientes de que ni pueden ni deben vivir de espaldas a la revolución tecnológica en la que la sociedad se encuentra inmersa. Las farmacias se mueven en un entorno cada vez más competitivo y deben ser capaces de encontrar en el seno de las nuevas tecnologías ese valor añadido que les haga diferenciarse de forma clara de su competencia.
La robotización, clave de la automatización de procesos
Cada vez son más los farmacéuticos que entienden que apostar por las nuevas tecnologías en su día a día pasa inexorablemente por la instalación de un robot que les permita automatizar la dispensación de hasta el 90% de los productos con los que cuenta en la botica y que se convierte en una herramienta clave para la gestión de su tiempo y de la forma de trabajar de su equipo. De hecho, muchas son ya las voces del sector que la ven como la mejor forma de potenciar la farmacia asistencial y de servicios, es decir, de volver a la venta activa - venta consejo que tanto está empezando a demandar el paciente.
Dispensación automática
Hablar de la automatización de una farmacia es hacerlo de sustituir las clásicas cajoneras y estanterías de la rebotica por un robot que realice la dispensación de los medicamentos mediante una petición hecha previamente a través de un software instalado en la farmacia. En el mercado existen dos clases de robots. Por un lado, el modulable, diseñado para farmacias pequeñas y medianas, que basan su funcionamiento en la colocación de cuántos módulos prefabricados se necesite para automatizar el stock de la farmacia, algo que supone una solución de excelente rendimiento y buena relación calidadprecio para esta tipología de boticas; y el robot adaptable que permite máxima capacidad de almacenamiento; alta velocidad de recepción y dispensación; y todas las funcionalidades necesarias para automatizar farmacias con un alto número de dispensaciones.
Hablemos de dinero
Pero ¿cuánto cuesta robotizar una farmacia? El precio dependerá del tipo de robot que el farmacéutico elija. Éste tendrá que pagar un precio único –que puede oscilar aproximadamente entre los 60.000€ y los 140.000€- que dependerá por un lado, e independientemente del fabricante, de si el robot es modulable o adaptable, así como de las prestaciones que se necesiten, es decir, número de brazos y de cintas o bandejas de entrada, si lleva incorporado o no es sistema de carga automática, si hace multipicking (recogida de varios envases a la vez), etc. A esta cuantía el farmacéutico tendrá que sumar la cuota de mantenimiento, que puede oscilar entre el 3,5% y el 8% anual del valor total del robot. Por otro lado, habría que tener en cuenta la realización de una posible obra en el interior de la farmacia para ubicar tanto el robot en un espacio lo suficientemente amplio, además de para poder hacer llegar las cintas transportadoras a cada puesto de trabajo.
Se trata, por lo tanto, de una importante inversión económica, por lo que resulta imprescindible analizar las ventajas que su instalación puede aportar al día a día de la farmacia. Entre ellas, a demás de las ventajas financieras de amortización de la inversión y mayor control sobre las me mas del stock de la farmacia, las ventajas operacionales, como son la optimización del stock; control del inventario y caducidades; la reducción de errores de dispensación y la satisfacción del equipo de la farmacia, que pueden dedicar su tiempo al consejo farmacéutico y a la interacción con el paciente.
Sin embargo, esto no es todo
Aunque son muchos los que ven la robotización como la alternativa más clara de incluir la tecnología en el sector farmacéutico, lo cierto es que en estos momentos hay un sinfín de posibilidades tecnológicas que pueden, además de hacerle la vida más sencilla al farmacéutico, ayudarle a potenciar su negocio y a trabajar en el incremento de sus ventas.
El primer ejemplo son las pantallas LED, que permiten al farmacéutico aumentar el escaparate de la farmacia potenciando la visibilidad de los productos y transformando este espacio en un lugar dinámico orientado a las necesidades de su público objetivo. Una de sus ventajas más significativas es que ofrece, a través de fotografías y vídeos, mensajes claros y directos sobre los servicios de la farmacia sus horarios, las promociones estacionales con las que cuenta, recomendaciones saludables, etc. Además, al permitir estos dispositivos la rotación de productos y mensajes, el impacto visual que provoca en el cliente es mucho mayor que las clásicas pantallas de plasma y LCD. En la misma línea se encuentran las tabletas electrónicas que muchas farmacias ofrecen en sus mostradores a modo de catálogo o para facilitar a los clientes extranjeros y con dificultades en el idioma que puedan traducir lo que necesitan de manera sencilla, ahorrando en tiempo y dinamizando el tiempo de espera en la cola.
Por otro lado, contar con un Sistema de Dosificación Personalizado (SDP) de medicamentos de forma automatizada es muy importante para aquellas farmacias que ofrecen este servicio. El objetivo de estos dispositivos no es otro que evitar los posibles errores que puedan surgir a la hora de crear los blisters, tales como la confusión de medicamentos con nombres similares, la incorrecta interpretación de la posología, etc. Apostar por la automatización de este proceso no solo permite empezar a verlo, como una nueva parcela de negocio dentro de la farmacia, sino que supone aportar valor a la profesión, reforzando el papel del farmacéuticocomo agente de la salud.
Evitando errores en la caja
Los Sistemas de Gestión de efectivo se han convertido en otra de las apuestas recientes de muchas farmacias con el que se busca acabar con los errores que puedan cometerse al cobrar, así como las discrepancias en los cuadres de caja, ya que recauda los pagos de los clientes y devuelve el cambio correcto basándose en criterios orientados a optimizar el flujo de caja del sistema. Contar con un dispositivo de estas características reduce el tiempo de espera en los puntos de venta de manera más que importante, por lo que la satisfacción del cliente aumenta.
Servicios personalizados: nueva apuesta
Ofrecer un servicio de plena calidad y totalmente personalizado es otro de los objetivos de Dermoanalizadores, dispositivos que se han visto envueltos en la tecnología más avanzada en los últimos tiempos. El mercado ofrece una importante variedad de marcas y modelos que permiten realizar exhaustivos análisis de la elasticidad, la hidratación, el nivel de queratina o sebo, la porosidad o las líneas de expresión de la piel; así como un análisis capilar muy exacto y completo a través del que puedan detectarse patologías y recomendar tratamientos. Estos dispositivos no suponen ningún daño, lo único que hacen es ofrecer información detallada y able. Además, sin con el uso de cualquiera de ellos se detectasen enfermedades que debieran ser tratadas por un médico, el farmacéutico sabe y es consciente de la importancia de derivar el paciente al mismo, por lo que su uso en la farmacia posibilita ofrecer un consejo farmacéutico con total seguridad. Asimismo, algunas farmacias, con el objetivo de aportar una mayor profesionalización a los servicios que ofrecen, también han decidido introducir la tecnología más avanzada en el análisis de parámetros bioquímicos, como son la determinación de glucosa en sangre, HbA1c, colesterol y per l lipídico, a través de analizadores de hematología de última generación que, en escasos minutos, ofrecen resultados rápidos, fáciles y ables con una gota de sangre, permitiéndonos la detección precoz y el tratamiento, en caso de ser necesario y siempre bajo derivación al médico, del síndrome metabólico, la diabetes y la dislipemia.
Y junto a todos estos dispositivos, muchos otros que quizás pasen desapercibidos para la mayoría de los clientes que entran en las farmacias, pero que han ido introduciendo, sin prisa pero sin pausa, la tecnología a nuestro alrededor: cruces y rótulos de LED, etiquetas electrónicas, tensiómetros, básculas, dispensadores de turnos, etc., que han venido, en su conjunto, a incrementar la satisfacción del cliente, ya que permiten al farmacéutico ampliar sus servicios y, en de nitiva, no solo contar con más tiempo para dedicar al paciente y a sus necesidades, sino que éste sea de mejor calidad.
Escrito por : Gonzalo Fernández Parada
